24 de noviembre de 2012

EL ÁGUILA CULEBRERA. (Circaetus gallicus)

Hola amigos y amigas de las plumas!!
Tras el capítulo anterior del blog:
Dejamos ahora guardadas la sierra de calar y la madera de pino para otra ocasión posterior y hoy nos vamos a centrar en otra especie de las que personalmente me encantan/enganchan: el Águila Culebrera europea (o a la que ahora llaman Culebrera europea...)
A mi me sucedía cómo a mucha juventud española antes de la llegada de la "telebasura" actual que absorbe diariamente los cerebros actuales, recuerdo que de aquella los pocos canales que existían se dedicaban a poner en pantalla cosas interesantes, y si en algo destacaba la televisión no era por el récord de horas de mierda que echan, sino por la calidad de aquellos programas y documentales relacionados con la naturaleza.
Recuerdo cómo después de cada capítulo de "Al Filo de los Imposible" o de escuchar al gran Félix Rodríguez de la Fuente a uno le entraban ganas al instante de escalar muros "himalayescos", o de buscar especies en extinción en mitad del parque de la ciudad...
El primer recuerdo que tengo de la Culebrera no es sino en uno de estos documentales en mi casa de Oviedo, con un bocata de Nocilla en la mano al salir del cole:
Esta estampa me imagino que os será familiar para muchos de vosotros; casi un par de décadas después abandonando mi bisoña niñez y mi perdida adolescencia; me dediqué a buscar información sobre la culebrera (que no es que sea mucha..) y a salir en su búsqueda por lo que es su hábitat ideal en Asturias a su llegada a la Peninsula: el monte bajo.
O al menos ese es el lugar en dónde yo siempre me las he encontrado...
Desde luego he de reconocer que la culebrera no es un ave fácil de salir, ver y fotografiar; lo primero dado a sus características ya que es un ave plenamente estival en el Norte y no viene en gran número (cómo por ejemplo sucede con el Milano negro).
Creo que a su escaso número no le ayudan muchos factores ajenos a ella, pero que ponga un sólo huevo no dice mucho por su parte... jejeje vamos hombreee!!! tenias que poner por lo menos 5!!!
;)
Por otro lado, el medio en el que habita cuando viene aquí es más bien el de la montaña, a veces cerca del litoral y tampoco parece muy amiga de acercarse al medio rural, sino que prefiere a veces el incómodo monte-bajo con alguna mancha forestal de por medio. Ya que puede utilizar los árboles cómo posadero o nido, que realiza en un buen señor árbol.
En la zona que pateo, suelen escoger los árboles de repoblación que se plantaron allá por los 60 los del ICONA, tipo pino (los pocos que han logrado sobrevivir...). 
Esto es complicado porque en esa época de primavera-verano ástur, los mejores y escasos días claros y soleados para fotografiar, son los mismos en los que la humedad es insoportable "pateando" por allá arriba, la orografía es vertical, el camino no siempre es cómodo y el helecho y matorral están en su punto álgido en tamaño; por lo que avanzar en este medio con la cámara y los prismas encima es ,a veces, sumamente complicado y costoso.
Además cómo siempre me ocurre: basta que vaya específicamente a intentar observar una especie concreta, para que esto suele acabar de dos maneras: o en rotundo fracaso o acabo fotografiando otra especie totalmente diferente a mi idea inicial... jejeje.
La primera vez que pude observarla bien y "mal-fotografiarla" estaba yo observando una colonia de Avión roquero que tradicionalemnte cría en una de las elevaciones más significativas de la Sierra de El Cuera en Llanes (Asturias) cuando observé que en un momento dado las avecillas se "revolucionaban" demasiado, perseguian y ostigaban a lo que yo identifiqué de primeras cómo un gran ratonero de fase blanca o una especie de  Águila pescadora (desde aquí se ve el mar, por lo que no me pareció descabellado...). 
Pero su tamaño, su color, su cabezota y sobretodo: el color de su ojo ya me llamaron la atención en ese instante.
Me quedé embobado siguiendo la secuencia de acoso entre pequeños y rápidos Davices contra aquél Goliat de cerca de 1,80 mt. de envergadura y aleteos lentos hasta que consiguieron vencer y echarla de sus dominios.
Pese a que la pobre Culebrera poco o nulo interés tenia en ellos, ya que venía de lanzarse sobre un matorral cercano a la colonia y estaba remontando vuelo (fracasando en el intento).
El pequeño Avión, acosando y persiguiendo a la enorme Culebrera
Desde entonces, en primavera-verano he utilizado varios puntos elevados de la Sierra del Cuera cómo "observatorio" ideal para poder esperar y observarla durante sus rondas por la Sierra; pues es un ave que aquí no la veo posada, sino siempre volando patrullando su territorio.
Ojo! No siempre me ha ido bien empleando esta "táctica" y no es lo mismo esperar a pie de coche o cómodamente en un observatorio, que subir hasta allá arriba. Aparte de que las condiciones climatológicas allí, no son iguales que abajo.
Pero en cambio te da la satisfacción de que los limitados momentos en los que hemos coincido ella y yo han sido sinceramente "mágicos" (visto así parece mi primera novia...) especialmente cuando en absoluto silencio, te encuentras cara a cara con este bella ave sin previo aviso.
A diferencia de otras rapaces cómo la escasa Aguila Real, el abundante Busardo ratonero o de los Alimoches o Buitres, que generalmente los ves llegar ya a lo lejos, la Culebrera siempre aparece por un lado, por sorpresa.En estos escasos momentos de observación, lo más normal es que la suerte no esté de tu parte y el ave tire de largo de tu posición, o no se acerque lo suficiente.En estos escasos momentos de observación, lo más normal es que la suerte no esté de tu parte y el ave tire de largo de tu posición, o no se acerque lo suficiente.
Y otros momentos, los que menos y que se cuentan con los dedos de una mano, en los que pasa por encima tuya para comprobar que no tienes ni escamas ni veneno...
Dejando a un lado la observación directa, a grosso modo puede llamarnos la atención la dieta que ha elegido la bella rapaz, o la manera con la que engulle los reptiles que caza (siempre primero por la cabeza para evitar atragantarse) ya que muchas veces lo hace con especies que superan en longitud su tamaño.
Aqui en Asturias, salvo en medios acuáticos, prados y otros hábitats diferentes a los elegidos por la Culebrera, no contamos normalmente con reptiles de ese tamaño, por lo que las presas que caza aquí (lagartijas, víboras, pequeñas serpientes o luciones...) los mata y come en el suelo.
Por lo visto, si fueran mayores tb. cabría la posibilidad de que se los llevara entre sus garras a otro lugar más seguro para descuartizarlos y engullirlos posteriormente.
Cuando esta criando a su pollo, lo que hace es engullir las presas para luego regurgitarla en el nido para que el pollo vaya aprendiendo la técnica.
Pero además de esto y de lo bien dotada que esta específicamente para ello (eficaz pico curvado, fuertes patas escamadas etc.) lo que me a mi personalmente me sorprende es la facilidad con la que parecer localizar reptiles.
Aunque vecinos y familia se sientan contrariados y no les guste mucho la idea, muchas veces he dedicado buen tiempo en buscar y fotografiar a esos mismos reptiles, los cuales ella parece localizar apenas sin problemas, bien es cierto que desde arriba la cosa se verá de otra manera y su ojo esta mejor dotado que el mio miope; pero también pienso en la cantidad constante de alimento que debe de obtener si quiere sobrevivir día a día, o ya no si quiere sacar adelante su pitu.
Por el veneno no os preocupéis, al parecer el bichu esta preparado para digerirlo sin problemas.
Apuesto a que seguramente durante todo el verano caminando por el monte, perdido por los bosques o segando fincas y desbrozando lindes, yo no encuentre más culebras que las que caza ella en un sólo día...
Cosa que aún más se me antoja complicada dado la escasez de "comida escamosa" por culpa nuestra (venenos-roedores, quemas de monte constante y la tradicional persecución a todo lo que tenga forma de serpiente...).
Para cazar este tipo de serpientes, he visto a la culebrera realizar varias maniobras diferentes, una de ellas consiste en dar pasadas a baja altura sobre terrenos pedregosos o matorrales quizás en busca de pequeñas aves.
Esto es muy atractivo de observar, pues a la baja altura a las que puedes verla, se le une su tradicional aleteo pausado y lento, unido a sus vistosos colores; por lo que verla maniobrar así, peinando las laderas es una auténtica pasada.
El motivo creo que es que en este tipo de terreno abierto de abundante roca caliza y grietas, agujeros... los reptiles se solean encima de las mismas a la peligrosa vista, pero cuentan con la ventaja de poder resguardarse ante el menor peligro de una manera fácil entre esas mismas grietas y cuevas. 
Por eso creo (es una teoría mía...) la culebrera cambia su estrategia habitual y realiza pasadas cortas y rápidas por la ladera, para así poder pillar por sorpresa a los incautos ofidios... 
La otra "manera" (y la más habitual) consiste en cernirse en el aire "a lo Cernícalo".
Es una pena no contar con un vídeo para enseñaros este arte a los que no lo hayáis visto nunca, pues si ya "presta" verlo en directo a un pequeño Cernícalo, imaginaros como debe de ser ver esto en esta gran y escasa rapaz.
Ejemplo:
- Inmóvil en el aire:
Se queda inmóvil en el aire, utilizando la cola abierta para poder mantenerse quieta en el aire:
Aquí se observa cómo las patas las lleva colgando:
Las fotos están sacadas a lo lejos, pues sube a unos 25-30 metros de altura, bajando escalonadamente, puesto que sus grandes ojos le otorgan una visión estereoscópica.
Si observa algo de interés allá abajo, se tirará directamente sobre ella con las patas por delante, dirigiéndose a la cabeza con sus poderosas patas.
Esto le servirá para atacar antes de ser atacada por una posible mordedura, además utilizará las alas extendidas para que la culebra no trate de enrollarse sobre ella.
Volviendo a las observaciones a pie de cima de montaña, en los momentos en los que por fortuna pasa por un lado tuyo o por encima, te deja petrificado al instante, un precioso plumaje blanco, con unas alas largas y anchas, un aleteo lento, un pequeño barrado ondulado marrón que rompe la monotonía del difícil (fotográficamente hablando) blanco.
Todo ello supeditado a su gran cabeza (si, es cabezota...) con su característico ojo amarillo, que en el momento que te mira, te engancha a esta especie.
La mirada de la Culebrera...
Si a todo esto, le añadimos el sonido "maullante" que realiza de vez en cuando (no es que sea muy parlanchina a diferencia de otros parientes, salvo cuando es época de cría...), te da un momento "especial".
Aquí en Asturias la encontramos cada vez en menor número a partir de Marzo y se queda con nosotros hasta Septiembre que se vuelve a África cruzando el Estrecho de Gibraltar,  ya Alfredo Noval en su "Guía de las aves de Asturias" hacia una estimación allá por el año 2.000 de una 30-35 parejas y disminuyendo.
Sinceramente viendo el panorama actual, la que nos esta cayendo y la que queda por venir.. no creo que en casi 13 años después de esta apreciación, la cosa haya mejorado mucho, o lo vaya a hacer...
Así que me considero tremendamente afortunado por llegar al pueblo en esas fechas y poder dedicarle los primeros días de la primavera a buscar  a "misAlimoches y Culebreras especialmente.
Alimoche
Ahora que releo todo lo que he escrito anteriormente, en lo referente a la tradición de matar las culebras y todo tipo de serpientes, me recuerdo del siguiente artículo de prensa que me llegó al correo el otro día:
los-autenticos-ecologistas
Por suerte para vosotros, hoy no quiero liarme mucho más,  el chisme éste me acaba de avisar que lo gratis no es eterno y que directamente me he pulido el giga de espacio free, por lo que ahora tengo que buscar una alternativa para seguir publicando entradas en el blog y no tener que hacer otro nuevo.
;)
Espero que os haya gustado esta entrada, si os ha sabido a poco os dejo unos vídeos y fotos alternativos:
portfotolio.net/juancho_vive
vídeos
Para la próxima estoy pensando o ruta de montaña, otro bicho con alas o una excursión maja que me he hecho por las tierras castellanas...
Un saludo, espero que podáis leer esto y gracias por los comentarios.

7 de noviembre de 2012

CAJA-NIDO LECHUZA

Hola compañeros y compañeras del universo "wild"!!

Hoy no voy a hablaros de ningún animalejo en concreto, hoy vamos a seguir con el tema del "bird-colaje" me toca lo que yo considero ya el tema estrella, el "súmmun" de las cajas-nido, la cúspide del tablero-pino, la élite del Leroy Merlin, la catedral de las plumas...

Si os habéis perdido los anteriores capítulos en los que para ayudar a los emplumados tirábamos de sierra de calar, o queréis hacer un repaso a lo ya construido hasta ahora, porque os aburrís mucho (yo diría que muchísimo...) aquí van los anteriores capítulos:
Después de todo esto, pienso que ahora me tocaba hacer algo "más grande" en todos los sentidos, no es que haya abandonado el tema de las cajas-nidos o del comedero, pero desde hace mucho tiempo tenia ganas de echarle una mano a un tipo de aves que me fascina ya desde bien crio: las rapaces nocturnas y no sabía muy bien cómo hacerlo.
Antes de tener cámaras y artilugios varios, antes de blogs, galerías de fotos y hasta Internet etc. de guaje pasaba (y paso) las noches de verano siguiendo las evoluciones de las "curuxas" (Lechuzas) que anidaban en los aleros de las viejas casas del pueblo, o caminaba por las caleyas de las afueras del pueblo, cerca de los bosques, en la búsqueda del ulular de los Cárabos.
En estos últimos años he tenido la inmensa suerte de que mi novia me acompañe en estas salidas nocturnas, aunque he de reconocer que no le hace mucha gracia estar completamente a oscuras con el peculiar "craqueo" que emiten las Lechuzas. A pesar de esto no duda ni un momento en ponerse las botas, el abrigo e irse conmigo linterna en mano; lo cual para mí es una gran satisfacción, porque así por lo menos paso la noche entretenido y las personas que me encuentro ya saben así que no soy un asesino solitario...
En el pueblo en el que habito una parte del año, tenemos la suerte de tener alguna que otra pareja de Lechuza común (Tyto alba) pese a no tener explotaciones ganaderas que favorezca su presencia, ni tampoco altos campanarios de iglesias, edificios antiguos, etc. ; pero a pesar de esto, los años buenos se ven fácilmente un par de parejas por el pueblo, incluso se solapan territorios entre ellas, llegando a anidar unas cerca de las otras.

NOTA: Perdonar que no suba fotos de los lugares que escogen para anidar, por eso de que en Internet puedes encontrarte muy buena gente, pero también unos cuantos hijos de puta con malas intenciones. Así que lo siento por la gran mayoría que os pasáis por aquí con buena intención y corazón, pero creo que vale más prevenir... ¿verdad?

Otros años parece más difícil dar con ellas, a pesar de que son aves sedentarias, con un mismo territorio (al que por cierto son muy fieles) y pese a que tampoco existen aparentemente peligros para ellas cómo depredadores, autopistas (en cuyos arcenes encontramos muchas de ellas atropelladas), ni venenos o expoliadores que yo sepa; incluso hay años en los que no escuchas reclamar a los polluelos dentro de los mismos aleros en dónde han criado el año anterior, e incluso en segundas puestas si el alimento abunda, y su presencia se constata apenas escuchándolas un par de veces en noches salteadas.
Cómo decía arriba, desde hace ya mucho tiempo pensé en la forma de ayudar a estas bellas rapaces y el detonante de todo esto fue ver que uno de los aleros en los que criaban una de las dos parejas de "curuxas" era totalmente reformado por los humanos y por tanto, había desaparecido el agujero en la madera por donde accedían al nido.
Personalmente para mí es una pena bastante grande, porque era un sitio apartado en dónde estos últimos años las esperábamos al oscurecer o al amanecer sentados, observando tranquilamente sus idas y venidas, la crianza de sus polladas durante las agradables noches de verano, cómo se posaban en los alrededores etc.
Pero tampoco voy a echar pestes, ni a decir nada en contra de esta actuación,  pues sinceramente si el alero de mi casa estuviera en esas condiciones también yo me decidiría a arreglarlo y que no se me cayera la casa.
Cómo ya sabéis, la Lechuza común es un ave que se encuentra muy ligada al entorno rural, cohabitando desde antaño con los hombres y mujeres de nuestros campos.
A pesar de su leyenda negra y dejando al margen las antiguas supersticiones que rodean al ave injustamente, el hombre tradicional del campo solamente con su observación directa se dio cuenta de que allí en dónde había una de estas bellas aves, no había problema ni de "ratos", ni de topos o "surnias" que afectasen a sus tierras y cultivos; esto con el devenir de los tiempos se fue olvidando por el campesino moderno, ya que la búsqueda de lo rápido, económico, comercial (y falsamente más efectivo) le conducía a llenar el campo no solamente de abonos y demás química sino de venenos; y así nos fue y nos va...
Solamente con el fracaso de esta política, parece que ahora afortunadamente se vuelve a lo de siempre...
Rapaces contra plagas
Si algo tienen las curuxas es que se resienten si se alteran mínimamente esos factores (disponibilidad de alimento y lugares de cría) por lo que su población fluctúa, y aviso: no es fácil que un territorio perdido se recupere fácilmente al año siguiente, sino que igual se pierde para siempre o no se vuelve a ocupar en unos cuantos años.
A esto le sumamos que la reconstrucción, reforma de casas y edificaciones de los pueblos para nada son atractivas desde el punto de vista "lechuzil", la cual necesita agujeros en edificaciones antiguas, y toda obra o reforma en antiguos edificios tiende a tapar o hacer desaparecer estos agujeros.
Menos mal que existen una serie de proyectos bastante interesantes:
Lechuza ALCEDO
Sinceramente, pensándolo durante tiempo siento que mi capacidad de actuación para combatir esto solamente es efectiva en mi casa, jajaja, y tb. a través de las líneas de este blog.
Lo primero de todo es averiguar que puedo yo ofrecer a las Lechuzas; lo que quiero decir con esto es que ,de hacer algo bueno por la Lechuzas, que al menos sea efectivo, asumible y realizable, no hacer una cosa utópica y poco práctica en la realidad.
Mirando el terreno y el plano de Google Maps me di cuenta de que ,por alguna circunstancia en mi barrio, no les daba por anidar al menos que yo recuerde en 30 años, aunque sí era visitado frecuentemente por ellas todo el año, todos esos años, pero: ¿Cuando se produce la mayor frecuencia de esas visitas?.
Pues lógicamente cuando criaban aparecían mas a menudo por aquí, ya que es el momento en el que tienen que cazar mayor número de roedores durante casi toda la noche para cebar a su numerosa y quejicosa prole.
Además observé que también aparecían por aquí, al igual que el jabalí, cuando o bien nosotros, o bien mi vecino, segábamos las fincas de casa.
Creo que uno de los múltiples factores de la desaparición de las Lechuzas, al menos en Asturias, fue el cambio en los años 80 y 90 del tipo de agricultura; ya que aparte del último abandono del campo-ciudad, también se une a los cambios en los usos del campo, ya que antes los prados se segaban y la hierba seca (o curada), se almacenaba en los pajares de las cuadras, sin embargo ahora los prados pasan a ser simples pastizales para el ganado de carne y se siegan un par de veces para hacer las llamadas "bolas" o "bolos" de silo que vemos juntos en las orillas de los prados con su forma redonda de plástico y de colores tan atractivos cómo el blanco o negro...
Las fincas del pueblo, no se escaparon a este cambio de hábitos, ya que nuestros abuelos (o incluso padres) dejaron de ser ganaderos; por lo que estas fincas o huertas cercanas a nuestras casas dejaron de cultivarse o de segarse para alimentar a los animales.
Solamente es ahora, con la crisis económica, las prejubilaciones y el paro, cuando se vuelve a los pueblos a plantar hortalizas en las huertas, plantar frutales, tras decenas de años en barbecho.
Sin embargo yo al recibir esta herencia, me he tenido que reconvertir en granjero artificial,  de origen urbano, de "fin de semana" y fan de "Stihl y Leroy Merlin".. yo claro esta y todos aquellos hijos y nietos de agricultores y mujeres del campo que aún hoy en día conservan su micromundo rural a modo de casa de verano, casa rural de alquiler, o una casita para pasar el fin de semana, alejado de la urbe.
Por lo que ,al igual que "mio guelu" y que otros "guelos", en el barrio somos un par de ellos los que tenemos que gustosamente pringar y dedicar buen tiempo de nuestras vacaciones y días libres a volver a plantar, podar, y cuidar frutales, limpiar las lindes, desbrozar y segar frecuentemente nuestras fincas para tenerlas limpias, todo ello con un cierto sabor a recuerdo de nuestros antepasados ya fallecidos.
El vecino tampoco lo hace mal...
Aunque el fin de lo que hacemos ahora con las fincas no sea alimentar a las inexistentes vacas como en antaño, a la Curuxa no le importa mucho esto.
En este asunto estamos bien cubiertos en la zona, pues pese a no anidar aquí, nos visitan frecuentemente en la búsqueda de esos roedores, que encima destrozan nuestros  flamantes céspedes y huertos; por lo que las Lechuzas siguen hoy en día realizando una labor encomiable.
Entonces si aquí tienen un hábitat digamos ideal, la siguiente y lógica pregunta es: 
¿por qué entonces no crían aquí? pues no lo sé a ciencia cierta, pero pueden existir un par de factores:
- En primer lugar el barrio se sitúa en la periferia del núcleo rural, y aparte de pequeñas fincas bien atendidas, estamos rodeados por una mayoría de pastizales y ya a partir de aquí entramos en las manchas forestales que resisten al eucalito, estamos ya en el territorio de la otra rapaz nocturna: el Cárabo europeo.
Abajo Google Earth con el barrio de "Los Malatos" en el que habito y con un pincho amarillo el lugar en dónde se situará la caja-nido prevista.
- En segundo lugar, todos los años echo un vistazo a todas las casas, cuadras y "edificios" de alrededor en la búsqueda de nuevos posaderos, territorios, evidencias de su presencia o lugares de anidamiento (por soñar que no quedé...) encontrando solamente un par de sitios ideales para ello, el resto son sitios inadecuados o que carecerían de interés para anidar.
Pese a todo esto, las lechuzas crían a 240 y 426 metros en línea recta de la caja nido instalada.
Con estas premisas bien aprendidas y memorizadas durante varios años he pensado en instalar una caja-nido específica para Lechuzas, pero por circunstancias varias lo he ido retrasando. El detonante para ponerme las pilas fue la desaparición de dicho nido de una de las dos parejas habituales, así que no ha sido hasta el Otoño cuando me he puesto con la operación: "CajaCuruxa2012".
Además de fincas bien atendidas y disponibilidad de alimento abundante y frecuente ¿qué más le puedo ofrecer yo a una lechuza
Pues creo que una buena caja-nido para que se pueda cobijar, refugiarse y ya de paso: criar.
Aquí continua el trabajo de laboratorio, porque: ¿qué hacer un domingo lluvioso y frío?
¿qué vamos a hacer ahora que los días son más cortos de luz solar y las tardes no nos dan para nada?
Pues yo me he dedicado primeramente a mirar y remirar los diferentes modelos de cajas-nido para Lechuzas que se han construido y publicado en Internet, consultar las diferentes experiencias de anidamiento en cajas-nido etc. Además he contado con la ayuda, tanto visitando sus blogs cómo personalmente de:
Haritz
Alberto
Unos verdaderos fenómenos que ,desde aquí, quiero darles las gracias y mi agradecimiento más sincero.
El lugar de colocación de la caja nido para Lechuzas era fundamental, puesto que a diferencia de las otras cajas nido para páridos y otras aves, esta debe de reunir una serie de requisitos un tanto más específicos y exigentes.
Abajo la vista panorámica desde el lugar en el que la caja-nido va a ser colocada:
En primer lugar tenía que ser una caja para exterior, es decir, si miráis por Internet encontrareis dos tipos de cajas-nido para Lechuza:
- Una para interior, se coloca dentro de una nave, en un desván antiguo, en un campanario etc., es decir que va colocado en un lugar atechado.
Ejemplo:
Caja nido Lechuza interior
- En segundo lugar existen cajas nidos para exterior, o lo que es lo mismo: van fijadas por fuera a una pared de un edificio o instaladas en un árbol.
Ejemplo:
Caja nido lechuza exterior
Os paso los siguientes planos y vosotros decidís las medidas y modelos, aunque os aconsejo que os paséis por los dos blogs de los señores de arriba:


Hay multitud de modelos y dimensiones, parece que no se pone nadie de acuerdo con las medidas "oficiales", o hacer una caja standard; en definitiva: no encuentras dos planos iguales con las mismas medidas.



Yo creo que ,al margen de diferencias de milímetros y centímetros, lo importante y primordial del asunto es escoger bien el sitio en dónde colocarla y que esté bien construida.
Ejemplo:
Éxito caja-nido Lechuza en Cantabria
Cómo bien decía la "moza" cuando me veía en casa echando cuentas y medidas y maldiciendo dioses varios a las tantas de la mañana... 
¿Qué más dará un centímetro arriba o abajo si vienen de anidar en un alero de mierda, podre, entrando el agua y la luz y "sin homologar"? jajaja
Más que un "caxón pa´páxaros" cómo anunció mi madre ,con cierto escepticismo, a la vecindad del pueblo ávida de noticas, parecía que yo estaba diseñando una nave espacial o un rascacielos, y la verdad es que ,a veces, un poco de sensatez externa no nos viene mal...
Me decidí por instalar una caja exterior, pese a que no es fácil dar con un sitio así, en primer lugar porque debe de ser un árbol preferentemente caducifolio porque ,cómo a la gran mayoría de pájaros y de nosotros los "pajareros", (salvo a los del FAPAS...) no creo que a mis huéspedes les guste cobijarse bajo un pino, o de un "eucalito"... :)
Eucalitos eucalitos, munchos eucalitos Asturaliaaaa!!!
Aunque no niego que pueda darse ese caso, es preferible ajustarse a un hábitat típico. Además debe de ser un árbol fuerte y alto, ya que por una lado la "cajita" al final del proceso de construcción pesará tranquilamente unos 9 kilos, cosa que para soportar eso (con temporales incluidos) no es broma para un árbol y por otro lado, la rapaz al parecer necesita una altura de no menos de 6 metros.
Así que con estos requisitos previos, solamente me quedaba un candidato en la finca, ¿adivináis cual?.
Una vez que más o menos tenía la idea, el lugar y el plano de la caja nido, era el momento de ir a por la materia prima... madera de pino de 18 milímetros de espesor; y nada mejor que este tablero de 2 metros de largo por 60 cms de ancho, de oferta a 11,95 € en cualquier Leroy Merlin. 
Si este precio os parece caro, por menos dinero podéis comprar por 10,75€ una acción del Real Oviedo y convertiros en accionistas de un club histórico:
Compra online
;)
Seguimos, tras revisar unos 20 tablones y ya cuando los empleados nos miraban ya mal, encontramos una  bastante decente para nuestro propósito.
Quién viera por televisión la saga de "Bricomania", sabrá que la madera de pino es fácil de trabajar, pero que tiene el problema de los nudos; así que recomiendo buscar un tablón que presente pocos nudos o defectos y que veáis que estos no afecten a la tabla a modo de grietas o que presenten agujeros que traspasen la madera de lado a lado.
Por último y finalizando la compra, tocaba pasar por la sección de clavos y tornillos para coger un buen puñado de tornillos y clavos por apenas 1,50€...
Os pongo los precios para que el tema económico o el desconocimiento no sean disculpa para no hacer nada.
¿No esta mal, verdad? el ahorro respecto a comprar la caja-nido hecha es bastante evidente:
Venta caja-nido lechuza
Un par de cosas referentes a la madera: 
El tablón entra en casi todos los coches, por lo que tampoco es disculpa dejar de hacer esta caja-nido porque "en mi coche seguro que no entra", tan solo tenéis que tomar un par de mínimas precauciones por vuestra seguridad y para no fastidiar el coche por dentro (nada raro que seguramente no hayáis hecho ya transportando muebles del Ikea o cargando las maletas de las vacaciones... ;)
Si al contrario, sois de esos tipos orgullosos que dicen a todo ¡¡"por mis coj... que entra dentro"!! y no hay manera, os pueden cortar el tablón en el momento a la medida que queráis. Lo mismo os digo si no quereís cortarlo en casa por comodidad, ruido, polvo...
Foto de abajo: Allá nos vamos felices para casa....
La siguiente fase es un tanto compleja y depende de las posibilidades de cada uno...el "centro de operaciones" no lo monté esta vez en la casa del pueblo, sino que fue en el piso de Gijón, ciudad en la que resido actualmente.
Esto tiene muchos handicaps en cuanto a limpieza, organización y ruidos, ya que lógicamente no es lo mismo ponerse a serrar, clavar etc. en una casa, que en un 5º... 
Tengo la suerte de que la parienta es una santa y me permitió el capricho, eso sí, luego me tocó limpiar a muerte el resto de piso y el coche para compensarla... jejeje
Foto: "el tablón de pino, uno más en la familia"
;)
Respecto a los vecinos, lo resumo rápidamente: con los de al lado no hubo problema, con bajar al garaje y aprovechar cuando no tuvieran el coche aparcado para darle a la sierra y al clavo y con los de abajo fue un "acuerdo tácito sin vernos ni hablarlo face to face"; para que me entendáis: decidí que cada vez que ellos hacían ruido en forma de música alta, discusiones/voces y el niño de mierda tocando la p... flauta, yo me ponía a serrar o clavar.
Oye!! pues fue mano de santo con ellos...ahora estoy hasta preocupado de que no estén todos muertos por un escape de gas, porque ni se les siente respirar... 
;)
Pero antes de los consiguiente golpes y ruidos, tocaba plasmar en el tablón las medidas de la caja-nido a realizar; por suerte cuento con un metro que tiene las medidas tanto en pulgadas como en centímetros, por lo que puedo adaptar al instante los planos con medidas anglos, sajonas y amerindias.
Ya os aviso de que esta caja no sigue ningún modelo o plano ya hecho (es original "Made in ElÑerudelXuan") puesto que he cambiado algunas cosas que no me gustaban e incorporado otras que sí; no lo he hecho por capricho, sino tras estudiarlo y hablarlo con alguno de los "gurús" del tema.
La caja tiene en el interior una división interna en dos partes, una primera es la parte de acceso o yo llamo: "pasillo", es decir parte por la que entra el ave dentro de la caja y que se comunica a su vez por otro agujero al fondo con lo que yo llamo "cámara", que es en dónde realizan la puesta y sacan adelante a sus pollos.
Esto se ve bien aquí:
Cómo podréis observar en las fotos que voy subiendo mientras escribo todo esto, una vez marcadas las piezas en el tablón y cortadas con la sierra de calar, solamente se trata de ir uniendo las distintas piezas ya cortadas.
Lo sé, tengo que limpiar la arena al gato
;)
Una de las modificaciones sobre otros planos y cajas que he visto es que si os fijáis bien en la foto de abajo, el tejado (o la parte de arriba del cajón) esta ligeramente inclinada, solamente son 2 centímetros de inclinación, pero lo suficientemente para que el agua, hojas etc. no queden paradas en el tejado y se deslicen hacia afuera de la caja-nido.
 Cualquier momento y sitio era bueno para ir armando la caja-nido poco a poco:
Cómo la caja va a ir a la intemperie y el pino no es una madera muy dura o resistente a las inclemencias del tiempo, una de las medidas para intentar que me dure más, es encajar las piezas verticales sobre las horizontales, a modo de cierre. No sé si lo he explicado bien, pero se ve bien aquí abajo, el objetivo es algo que voy a repetir muchas veces: evitar que nos entren en el interior 3 cosas difíciles de detener: insectos, agua y luz.
De esta manera pienso que no se pueden filtrar/colar tan fácilmente por las tablas verticales, aunque por contra: hay que ser "más fino" a la hora de hacer los cortes en las piezas para que encajen bien unas con otras.
- Para fijar bien las piezas, he usado 4 elementos; primero una buena cola que esta de moda y que ya veremos el resultado que da a largo plazo...
- Después unos buenos tornillos de 5 centímetros:
Estos tornillos son la parte fundamental de la sujeción de la estructura, de ellos depende una buena sujeción y unión de las partes.
Ojo!! esta vez no he usado el atornillador eléctrico, sino que los metí a muñeca, y así me quedó el brazo... jejeje
 - Seguimos con unos buenos y tradicionales clavos de 4 centímetros que no pueden faltar en estas tareas porque: ¿que sería de toda esta obra sin dar un solo martillazo o golpe?:
- Finalmente, sellamos los bordes del exterior con masilla reparadora de pino que funciona de miedo y que ya he utilizado ,con muy buenos resultados, en el sellado de las cajas-nido para páridos; además es bastante barata y fácil de encontrar y aplicar:
El antes y el después del sellado de las uniones:
- Y de nuevo volvemos con la cola al interior:
El motivo de este sellado interior es extra porque ,aparte de unir y fijar bien las diferentes piezas; se trata de que especialmente no entre la luz en el interior, con ello casi convertimos la caja en estanca.
Si insisto tanto en el tema de la luz, es porque a las lechuzas no les gusta la luz, por lo que esto es uno de los pilares o mandamientos de mi "caxón", y va a misa...
Una caja puede aparentemente ser perfecta en cuanto ubicación, altura, medidas etc. pero si le entra luz, creo que las Lechuzas pasarán de ella olímpicamente.

En la cara de la caja que da al frente, se realiza el agujero de entrada a la caja-nido, tiene que tener unas características particulares, a 10 cms del suelo o la base y con unas medidas que varían según los diferentes modelos, pero que yo he establecido en 14,5 cms. de ancho por 15 cms. de alto. Os aviso porque si buscáis encontrareis diferentes medidas de este agujero, pero más o menos, son esas.
Otra modificación que he hecho es la puerta de acceso, en casi todas las cajas-nido que he visto estas semanas pasadas, la sitúan o arriba (en el tejado) o en la parte de atrás de la caja; pero se me planteaban varios problemas poniéndola en estos dos sitios.
- El primero es que la escalera se me queda corta y ya no me da más altura, por lo que no podría acceder bien al interior desde allá arriba para revisarla, limpiar el interior etc.
Si por el contrario la puerta fuera en la parte posterior, tendría que descolgarla del árbol para poder abrir dicha puerta, una cosa un tanto absurda en mi caso.
- El segundo básicamente es la entrada de luz/lluvia/insectos, sinceramente no me interesa ninguna ranura o mínimo espacio por la que se pueda filtrar tanto la luz cómo el agua y menos aún: desde la parte de arriba de la caja.
Así que finalmente la he puesto abajo en un lateral, es pequeñita puesto que tampoco es mi intención andar abriéndola y cerrándola muy a menudo, ni tampoco me sirve nada más que para limpiar el interior y realizar una inspección ocular muy de vez en cuando, por lo que he pensado que en cuanto más pequeña en definitiva: mejor.
La puerta tiene un par de cosillas para explicar; cómo veis en la foto de arriba, pese a que procuré hacer los cortes bien rectos, una sierra de calar corta cómo corta y unido a un zurdo que la maneje... ;)
por lo que las uniones no encajarán bien al 100% por muy buen pulso que tengáis, así que le dí vueltas a la cabeza y para que no entren los de siempre (insectos, agua y luz), le puse un par de remedios:
- Primero con el trozo de goma que me sobraba de las otras cajas-nido (era la funda de un antiguo puñal en una época oscura y turbia de mi vida pasada jajaja...) cortamos una tira y la pegamos arriba, pero por dentro de la caja:
Este es el resultado final, aquí se ve bien este proceso:
Lo ideal hubiera sido graparla desde dentro, pero fue un remedio sobre la marcha, así que para fijar la tira interior utilizamos lo más potente en pegamentos y dejamos secar bien:
Lo siguiente es hacer la bisagra de la puerta; podría haberle puesto la típica bisagra metálica, pero me decidí por esta porque a la vez que realiza su trabajo de abrir y cerrar la tapa/puerta, también me aisla ese lado entero; aparte de que no quiero poner ni pestillos ni bisagras que se oxiden con el tiempo.
Al final el resultado es éste:, cómo veis al cerrar la puerta, gracias a la tira interior y a la bisagra de goma, no entrará nada del exterior:
Cómo elemento de cierre, no me compliqué mucho la vida, algo fácil y sencillo:
Todo esto es opcional y mientras la puerta quede bien cerrada vale cualquier otra idea.
Una vez que ya tenemos hecha la estructura de 6 piezas o tablas unidas y hemos hecho la puerta en uno de los laterales, el siguiente paso es unir la pieza que divide la caja en dos partes y su función es a modo de pared o tabique de división.
Esta pieza me ha llevado un buen tiempo, la he realizado ajustándola a milímetros, para que quede el mínimo espacio entre las diferentes partes y se ajuste al máximo a la estructura de la caja. 
El agujero cuadrado de paso a la cámara es idéntico al de la entrada a la caja-nido.
Una vez cortada la pieza, la anclamos bien de la misma manera que el resto de las diferentes partes (con cola, tornillos y clavos) ojo, aquí tenemos que medir bien para que los clavos y tornillos coincidan con la tabla vertical del medio que tenemos dentro y no nos pasemos de frenada...
Una vez bien fijada esta pieza intermedia, procedemos a sellar bien las uniones tanto por dentro cómo por fuera; cómo veis en la foto de abajo el resultado final es éste, esto sería lo que ve una Lechuza desde la entrada de la caja.
Aunque en la foto parece más estrecho, nos quedará una especie de pasillo-corredor de unos 18 centímetros de ancho en el que ,por lo que tengo visto en alguna webcams de pájaros, las rapaces suelen utilizar este espacio no solamente para acceder a la cámara, sino también para descansar durante el día, refugiarse de temporales, frío, vigilar etc:
Ya tenemos todas las partes unidas pero nos queda un añadido personal a la caja-nido lechuzil que ya aviso que es totalmente dispensable, pero ya que tenía por casa unos recortes de esquineros de pared...¿qué mejor momento para utilizarlos?
Los he fijado con pegamento de ese que anuncian que pegan edificios unos con otros y con un par de puntas en los extremos, rematando con masilla las esquinas y uniones para que sean lo más impermeables posibles...
Cómo veis en en la foto de más abajo, la función que le otorgo a este esquinero es doble; porque por un lado refuerza todo lo anterior (no: agua, bichos, luz) y también me sirve de soporte al tejadillo que le vamos a poner más adelante.
El resultado final será más o menos éste:
Respecto a la parte que lleva el esquinero en la puerta de acceso lo solucioné del siguiente modo:
Cómo se observa en la foto de arriba, el esquinero es ,a propósito, más largo que la propia puerta; pero lo hice para que no entre lo de siempre por las uniones.
De este modo entre la bisagra a la derecha, el trozo de goma del interior arriba y éste esquinero a la izquierda, el sellado es completo a los cuatro lados.
Me queda un detalle ya para obtener buena nota; en las noches largas de consulta internauta observé que en algunas cajas para nocturnas, a la entrada de las mismas les incluyen un pequeño tejadillo cuya función creo que es la de impedir que el agua de la lluvia entre adentro y también para reducir o eliminar luz solar del interior.
Así que seguí aprovechando los recortes y el resultado fue éste en el agujero de la entrada:
Más o menos la labor de carpintería ya la tenemos acabada, pero nos falta añadirle un buen soporte vertical que la fije correctamente al árbol. Esto también varía dependiendo del tipo de soporte que tengáis pensado utilizar para fijar la caja. 
En mi caso particular, ya he llevado la caja-nido al pueblo y he hecho este soporte a la medida de la parte concreta del tronco del roble en el que quiero que vaya bien sujeta.
El peso que soportará esta pieza (un tablón de obra de toda la vida y naturalmente "prestao", que así es cómo sabe mejor...) es bastante grande, además la altura a la que va la caja es considerable, por lo que no tengáis miedo a la hora de meter tornillos...
Especialmente es importante fijar los tornillos a los bordes, en dónde tendrá mayor agarre.
Ojo!! cuidado con no traspasar la tabla con los mismos, no vaya a ser que los bichos al entrar dentro poco más queden empalados...
Queda tirar de brocha, en primer lugar decir que aproveché los botes de pintura que seguramente tenemos todos almacenados por casa; pienso que no hay mejor reciclaje que el acabar todos esos productos que empezamos para nuestras chapuzas varias pero que no llegamos a acabar y los guardamos inúltimente, por lo que seguramente al cabo del tiempo caducan, no nos sirven para la siguiente obra, y los tiramos a la basura sin más.
Por ejemplo: tenía un bote a medio acabar de tratamiento para la madera, lo que quedaba en el bote no me daría ni para utilizarlo en una puerta, por eso lo tenía guardado sin darle un  uso, hasta ahora que se me iluminaron los ojos al verlo en la estanteria...
¡¡Señores: digan lo que digan nuestras señoras, no hay nada mejor que guardarlo todo!!
;)
Al parecer y según lo que dice el bote, el protector de madera es: insecticida, fungicida, hidrófugo, protege del sol y es de poro abierto.. 
Seguro que si echamos un trago nos convierte también en inmortales... (broma: ON) por mí con tal de que cumpla la mitad de lo que dice...
Una mano bastante ligera pero que cubra todo y lo dejamos secar bien 6 horas y pasamos a utilizar el bote de barniz que usé para una viga de madera antigua, curiosamente el barniz es de color roble, y la caja-nido va fijada a un roble; por lo que tb. nos viene genial.
Las manos de barniz dependen del gusto o posibilidades de cada uno y de cómo vea el acabado de la madera según vaya pintando, cómo yo ya le he dado anteriormente una mano del tratamiento, en este caso con una sola mano ya quedaría perfectamente impermeable y de tacto pulido y liso.
Pero cómo me tiene que durar un par de años allí colgada, decido dejar secar a esta capa y darle posteriormente una segunda mano. Será por manos...
Os dejo una foto para que veáis la diferencia entre una sola mano (a la derecha) o con dos manos (izquierda)
Ojo!! todo este tema de tratamientos para la madera o barnices los utilizamos solamente en el exterior de la caja, el interior ni se toca, se deja de madera de pino tal cual.
Si ya os tenéis que estirar y comprar un bote de barniz para darle, os aconsejo que ya deberías de ir a por un barniz ecológico.
La última parte, la dejé en el aire hasta el último momento, anteriormente había barajado gracias a la opinión y experiencia de Alberto, era el ponerle o no en el tejado un plástico rígido pero flexible (o algo similar) para que protegiera a la caja ,aún más, de las inclemencias del tiempo lluvioso astur.
Así que tras hablarlo con él y ver que el sí le había puesto "tejadillo", corría por el desván de casa y encontré estas láminas de plástico que se utilizaban para forrar las paredes que estaban en mal estado.
Las uniones entre estas láminas es fácil, es tipo "clic" de suelo tarima; ademas al ser rígidas e impermeables parecen resistir bien el agua.
Por lo que tocaba tirar de cutter y cortar y ensamblar las piezas a la medida del tejado de la caja-nido; eso si: con picardía dejamos un par de centímetros de más para que el agua no caiga directamente sobre la madera, sino que ya caiga al suelo sin tocar la madera.
Uniendo las piezas y anclándolas con pegamento y chinchetas de rabo largo (así no entra el agua por el agujero) vemos que los esquineros puestos en los bordes cumplen una función extra, la de dejar una especie de cámara de aire entre el tejado de plástico y la madera de la caja, por lo que nuestro tejadillo ni tocará la madera directamente.
El resultado final será el de más abajo, además como veis éstas láminas imitan el color y los nudos de la madera, por lo que nos viene genial.
El siguiente paso es rellenar la cámara con serrín de madera de roble, cortado en largo; aquí aviso de que hay un poco de controversia, pues no logro acertar si la mejor solución es dejar la cámara sin nada ya que las lechuzas ponen los huevos sobre las propias egagrópilas que expulsan, o bien ponerles paja, arena, serrín etc.
No recuerdo bien en dónde leí que ,en el caso de poner serrín, éste no debería de ser el típico serrín en polvo, sino que debe de ser trozos largos. Tampoco sé o recuerdo el motivo.
Quedan solamente tres detalles: uno es cerrar la puerta con un brida de plástico que deje la puerta bien cerrada:
Otro es realizar con una broca de madera del 5, un fino agujero en el suelo de la parte de la entrada y otro en la parte de la cámara, su función será desalojar el posible agua que pueda entrar dentro. Aunque hemos sellado todo bien, nunca se sabe...
En algunas cajas veo que hacen agujeros de ventilación, yo creo que son un tanto absurdos y que lo único que consiguen es todo lo que llevo yo evitando paso tras paso.
Aconsejo (si se puede) hacer los agujeros una vez colocada la caja, el motivo es que el árbol o la pared pueden engañarnos y no ser rectos del todo, por lo que al colgar la caja puede que tenga alguna inclinación que no hemos calculado desde abajo, así que haremos los agujeros allá en donde veamos que se puede acumular agua al estar inclinada.
Finalmente, un trozo de lo que nos ha sobrado de tablón de pino nos ha servido para utilizarlo cómo posadero; lo he dejado sin barnizar para que ,al contacto con las patas del ave, no le resulte extraño posarse allí.
No tiene ningún misterio puesto que las ramas del árbol le servirán de posadero, a diferencia de la caja-nido interior, no necesitaremos una peana debajo.
Ahora nos queda la parte más difícil y delicado del proceso, con una buena escalera (prestada por mi vecino sportinguista Juan) toca subir esa especie de "mini ataúd" que hemos construido al roble unos 6 metros ante el asombro y estupefacto de la vecindad.
Para que os hagáis a la idea del porte del árbol, vamos a poner a mi tío cómo referencia, el cual por cierto me ayudó gustosamente en esta última fase:
Subir la caja no fue fácil y debemos de tener mucho cuidado dado lo aparatoso del "cajón" y su peso nada desdeñable, al final pillé una buena sudada mientras ya anochecía, pero puedo decir quedó bien fijada al árbol y perfectamente orientada:
Me hubiera gustado utilizar un método menos agresivo para el árbol que las puntas, y en parte el alambre acerado que veis, bien tensado al tronco con unos alicates, me ha evitado clavar unas cuantas más, pero en la parte de abajo del roble es donde hacemos el compost con la hierba segada de la finca, y no me gustaría que los 9 kilos de pino cayeran en la cabeza de alguno que pasara por allí...  
Cómo buena obra, había que esperar a que volviera a llover, así que al día siguiente regresé al árbol para ver cómo había pasado el primer día a la intemperie bajo el frío y la pertinaz lluvia, si había algún problema no detectado la tarde anterior etc.
Cómo podéis observar en las dos fotos de arriba, el tejadillo de plástico rígido, soporta muy  bien el agua, además dado la leve inclinación y su superficie pulida no porosa, permite que el agua desaparezca casi al instante. Esto me ha sorprendido positivamente.
Por otro lado, las dos buenas manos de barniz hacen lo propio con el agua en los laterales de madera.
Al fondo se ve el Pico Soberrón o cómo lo conocemos aquí "El Castiellu" visto desde la  imponente y recién inaugurada caja-nido para Lechuzas de La Galguera, Llanes.
El Pico, pese a su escasa altura, es por su forma desafiante el emblema totémico del Texeu y casi me atrevería a decir que de toda la Sierra de El Cuera (con permiso del Pico Turbina), pues desde su cima se observa una buena franja de Mar Cantábrico.
Lo de llamarlo "Castiellu" se confunde o se asocia erróneamente a la forma de la montaña con un castillo, sin embargo la cosa va más allá, ya que cuando Llanes formaba parte en la Edad Media de la Puebla de Aguilar, se estableció en su cima una especie de atalaya de observación-defensa, (hoy en día llamarlo: Castillo de Aguilar, es un tanto presuntuoso...) del cuál hoy en día quedan algunos restos. Su origen se documenta ya en el año 1032.
Posteriormente, este puesto elevado de observación-defensa se abandonó, trasladándose a un edificio en el siglo XIII, el hoy conocido y famoso: torreón de Llanes.
Torreón de Llanes
Tiene muchas leyendas además mi abuelo con 7 años pasaba largas temporadas por allá cuidando de las cabras y yo con esos 7 años decidí un día salir de casa y subir sólo hasta allá, pese al disgusto familiar, no se me quitaron las ganas y no es raro el año que suba 4 o 5 veces al año; pero eso es otra historia que ya contaré...
Conclusiones finales:
1. En cuanto a la construcción de la caja, creo que según las dimensiones estudiadas, me ha quedado tal vez un pelín pequeña; me ha quedado finalmente en unos 90 cms de largo por 60 cms. de ancho y unos 40 cms. de alto (aproximadamente), cuando hay cajas-nido que fácilmente alcanzan casi el metro de largo y los 45 cms de alto.
2.  Siendo sincero y aséptico ,pese a mi entusiasmo en tan maña obra, creo que las probabilidades de que ocupen la caja son mínimas, por lo menos a corto plazo. 
3. Eso sí, yo me siento tranquilo con esta labor y los vecinos al menos ya saben de qué va el asunto ante la nueva visión de esa extraña caja colgada del árbol...

Un saludoooo!!