16 de abril de 2015

LA BUSCARLA PINTOJA. (Locustella naevia)

Hola amigos y amigas.

Llega la primavera y con ella llega al amanecer/atardecer uno de los sonidos más representativos de nuestros paseos campestres ávidos de localizar bichos, ese extraño e insistente sonido de chicharra procedente del interior de los matorrales más expesos. Llega el turno de hablar de la Buscarla pintoja!!.
Y es que lo singular de esta ave de la que vamos a hablar hoy es que quién más o quién menos seguramente haya escuchado su peculiar trino alguna vez, pero son pocos los que primero reparan en saber de qué bicho procede realmente este singular sonido y menos aún tienen la oportunidad de poder observar a esta enigmática ave. Abajo enlace a la mejor página web en cuanto a reclamos, trinos y demás ruidos producidos por aves:
xeno-canto.Locustella+naevia
Para mí son dos son las cualidades que sobresalen de esta ave, por un lado lo dicho: su penetrante trino que se asemeja al de un saltamontes, chicharra, carrete de pesca etc. que puede mantener durante incluso un par de minutos y que se escucha desde larga distancia y por otro, al igual que si fuera un ratón de campo, desplazarse por lo más oculto del matorral, sin ser apenas detectada. Que fácil queda eso de caer en la tentación de decir eso de que a la "Buscarla hay que encontrarla"...
Dentro del Top10 de: "Aves desesperantes y difíciles de fotografiar", se encontraría precisamente el protagonista de hoy, cosa curiosa ya que no es un ave escasa aquí, que aparece regularmente cada año y que además se suele localizar bien precisamente por su estridente canto.
Si hacemos caso a la literatura especifica dice que en época de celo los machos cantores se posan al descubierto en perchas o posaderos del matorral/tojal, cosa que yo sólamente he podido fotografiar (y de pura chiripa...) en contadas ocasiones. En estos momentos la Buscarla pierde toda su timidez, se envalentona al descubierto inflando su garganta blanca, y puedes estar casi al lado de ella sin que se espante. 
En una ocasión, gracias a que el matorral no tenía hoja (efecto del herbicida) pude ver cómo es el ritual de cortejo descrito, el macho persiguiendo a la hembra con un palito en el pico e inclinándose hacia adelante mostrando su gruesa cola. Abajo foto (testimonial) en el que el centro de la foto se intuye al macho inflado y con la cola desplegada detrás de la hembra (abajo a la derecha y desenfocada).
Lo habitual es observarla entre la maraña vegetal formada por el denso matorral (el "mato", "matu", "bardial", "escayal"..), allí dentro se moverá incansablemente entre las cañas, ramas y demás, trepando con suma facilidad por los tallos o incluso andando por el suelo, todo ello sin desplegar las alas o intentar volar, por lo que incluso choca ver a un ave moverse cómo si no fuera tal.
Aprovecho para mostrar un detalle que me encanta del ave, su cola. Y es que sorprende su forma redondeada, sus rectrices centrales más largas que las externas y finalmente el rayado por abajo.
Después de todo lo dicho a mi no me parece un ave asustadiza, me explico: siempre y cuando el ave se encuentre bien protegida y camuflada dentro del matorral, puedes estar perfectamente al lado de ella sin que se espante o abandone el matorral volando. Incluso hay Buscarlas que deciden pasar la temporada estival al lado de un camino transitado por excursionistas o por una senda costera.
Los colores de su plumaje y la forma que adopta al moverse por dentro le ayudan mucho a la hora de pasar completamente desapercibida, un plumaje con unos tonos verdes, pardos y amarillentos, se le añade zonas moteadas o rayadas.
En estas semanas pasadas ya ha comenzado a citarse ejemplares que recientemente han llegado de su área de invernada (zona transahariana del África tropical). Como ave reproductora aparece en la zona del Norte peninsular o Cantábrico, aunque en época de migración (en estos momentos por ejemplo) podemos encontrarla de forma escasa en el resto del fragmentado y ruinoso Estado español.
Aquí en Asturias la he podido observar en dos hábitats bien diferentes, primeramente por las zonas de pastizal o prados de valles interiores, y por otro lado las zonas de campiña/rasa costera, marismas o rías etc. pero en ambos espacios siempre que cuenten con zonas apropiadas de matorral denso.
Es un ave netamente insectívora, consumiendo todo tipo de odonatos, lepidópteros, tricopteros, hemípteros y dípteros y toda cosa de bicho que acabe en "-ptero", además de "jalar" con buen gusto todo tipo de arañas, hormigas etc. 
Dicen los libros que ocasionalmente también puede completar esta rica dieta con semillas o bayas de diferentes arbustos, pero yo al menos siempre la he visto con algún asquerosete bicho en su pico... 
Por tanto no me quiero ni imaginar lo que "limpiará" solamente este bicho en cada matorral que ocupe, manteniendo a raya a todo tipo de insecto o intento de plaga biblíca que intente dominar el mundo. Conclusión, deberíamos de hacerle un monumento a cada tipo de ave insectívora que tenemos, pues sin estas aves no me quiero ni imaginar cómo andaríamos por el campo y como estarían nuestros cultivos.
Es una especie que puede haber salido beneficiada por el abandono del campo o de los usos tradicionales, la "matorralización" producto del abandono de la siega por el diente de las reses, pero a la vez también resulte seriamente perjudicada por el uso y abuso de herbicidas y seguramente una vez seco posteriormente pasto del fuego con el propósito de "limpiar" especialmente en los linderos de prados. 
El uso de plagicidas también puede afectarle siramente a este y el resto de aves, especialmente las que se sustentan gracias a los insectos. Finalmente la reciente especulación urbanización de tramos costeros con el "boom" de la construcción parece que no le han ayudado mucho a esta especie y a muchas otras.
Sin tampoco insistir mucho en el tema llevaba un par de años intentando sacar alguna fotografía decente (dentro de mis posibilidades) de esta especie, pues hasta el momento si bien las observaciones que tengo de esta especie han sido buenas, pero en el momento de obtener alguna fotografía me encontraba casi siempre con el handicap de los palos, ramas, pinchos, hojas y demás de por medio, por lo que a veces era un tanto desesperante lograr que la cámara enfocara perfectamente o que el bicho saliera en la foto "limpio".


Todo es mejorable y esta primavera-verano ya tengo localizados un par de matorrales que traen incorporado de serie ese sonido chicharresco, por lo que todo será cuestión de paciencia y suerte. Mientras tanto para ir finalizando os dejo con unas de las mejores fotografías de Buscarlas asturianas que he podido ver, de unos buenos amigos :
buscarla-pintoja
Un saludo y gracias por los comentarios y las visitas

5 comentarios:

  1. Yo la subiría al top 5, Xuan, menudo marrón sacarle fotos a esta señorita.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola Fénix!!
      pues la verdad es que sí que es complicadillo, hay que tener mucha paciencia y escoger un lugar "despejado" dentro del mato que sepas que más tarde o temprano pase a lo "ratón" de campo. A veces hay suerte y sale al descubierto pero o es por poco tiempo o te pilla de improvisto.

      Un saludo

      Eliminar
  2. Simplemente genial. No te lo creeras, jamas he visto esta especie...
    Saludos camperos!

    ResponderEliminar

Me gusta que la gente lea y comente, escuchar otras opiniones, aprender juntos y ver que hay vida más allá de la pantalla; por eso procuro contestar a todos vuestros comentarios.